3 rutas imperdibles para disfrutar el Puente de Noviembre 2024

1. Ruta por La Rioja (Gastronomía y enoturismo)

Si eres amante del vino, la buena gastronomía y la historia, La Rioja es un destino perfecto para pasar el Puente de Noviembre. Esta región, a menos de dos horas del País Vasco, combina la riqueza de su cultura vinícola con pueblos llenos de encanto e historia.

Día 1: Logroño y la Calle Laurel

Comienza tu escapada en Logroño, capital de La Rioja. Este primer día lo puedes dedicar a explorar el casco antiguo, visitando la Concatedral de Santa María de la Redonda y paseando por sus calles llenas de vida. No puedes perderte la Calle Laurel, famosa por su gran oferta de pinchos y vinos. Aquí, cada bar tiene su especialidad, desde champiñones a la plancha hasta morcilla. Es un excelente lugar para disfrutar del ambiente local y empezar a degustar los caldos de la región.

Día 2: Laguardia y el vino de Rioja Alavesa

El segundo día, te sugiero que te dirijas a la Rioja Alavesa, donde los viñedos y bodegas dominan el paisaje. Visita Laguardia, un precioso pueblo medieval amurallado que se alza en lo alto de una colina. Puedes recorrer sus calles empedradas, visitar la Iglesia de Santa María de los Reyes y hacer una visita guiada a alguna de las bodegas subterráneas, muchas de ellas construidas bajo las casas del pueblo.

A solo unos kilómetros de Laguardia se encuentra Elciego, donde podrás visitar la espectacular bodega de Marqués de Riscal, diseñada por el arquitecto Frank Gehry. Este impresionante edificio de formas onduladas alberga una bodega de renombre internacional y un hotel de lujo. Aquí, puedes hacer una cata de vinos y aprender más sobre el proceso de elaboración del vino de Rioja.

Día 3: Haro y San Millán de la Cogolla

El último día, visita Haro, capital del vino de La Rioja. Aquí puedes recorrer el famoso Barrio de la Estación, donde se concentran algunas de las bodegas más históricas de la región, como Bodegas López de Heredia y La Rioja Alta. Si aún te queda tiempo, puedes hacer una excursión al Monasterio de San Millán de la Cogolla, cuna de la lengua castellana y Patrimonio de la Humanidad. Es un lugar perfecto para cerrar tu viaje con un toque cultural.

2. Ruta por Navarra: Selva de Irati y Pamplona

Si lo que buscas es naturaleza y tranquilidad, Navarra es una opción ideal a solo unas horas del País Vasco. Con paisajes otoñales impresionantes y una rica oferta cultural, esta ruta te llevará por la famosa Selva de Irati y la vibrante ciudad de Pamplona.

Día 1: Selva de Irati

La Selva de Irati es uno de los mayores hayedos de Europa y un paraíso para los amantes del senderismo y la naturaleza. En otoño, este bosque se tiñe de tonos dorados, rojos y naranjas, creando un paisaje espectacular. Desde el País Vasco, en menos de dos horas puedes llegar a este rincón natural. Hay varias rutas de senderismo señalizadas que se adaptan a distintos niveles de dificultad, desde paseos cortos hasta rutas más largas. Un recorrido recomendado es el que sale desde Ochagavía, un precioso pueblo pirenaico que parece detenido en el tiempo.

Día 2: Ochagavía y los pueblos de la montaña

Tras una caminata por la Selva de Irati, dedica el segundo día a explorar algunos de los pueblos más bonitos de la zona, como Ochagavía y Orbaitzeta. Ambos tienen un encanto especial, con sus casas tradicionales de tejados rojos y calles empedradas. Puedes visitar la Fábrica de Armas de Orbaitzeta, una antigua fábrica de municiones rodeada por un impresionante paisaje de montañas y bosques.

Día 3: Pamplona

El último día puedes aprovechar para visitar Pamplona, famosa por sus encierros durante las fiestas de San Fermín, pero también rica en historia y cultura. Pasea por el Casco Viejo, donde encontrarás la Plaza del Castillo y la Catedral de Santa María la Real. Si te gusta la gastronomía, no dejes de probar el cordero al chilindrón o las deliciosas verduras de la huerta navarra, como los espárragos y los pimientos del piquillo.

3. Ruta por Cantabria: Picos de Europa y Santillana del Mar

Para aquellos que prefieren la montaña y los pueblos con encanto, Cantabria es un destino perfecto. En menos de cuatro horas desde el País Vasco puedes sumergirte en los impresionantes paisajes de los Picos de Europa y descubrir algunos de los pueblos más bonitos de la región.

Día 1: Potes y el teleférico de Fuente Dé

Comienza tu ruta en Potes, un pueblo encantador en el corazón de los Picos de Europa. Potes es conocido por su ambiente acogedor, su gastronomía basada en el cocido lebaniego, y por ser la puerta de entrada al teleférico de Fuente Dé. Desde Fuente Dé, el teleférico te lleva a 1.823 metros de altitud, ofreciendo vistas panorámicas de las montañas y valles circundantes. Este es un lugar ideal para realizar senderismo o simplemente disfrutar del paisaje.

Día 2: Parque Nacional de los Picos de Europa

Dedica el segundo día a explorar más a fondo el Parque Nacional de los Picos de Europa. Puedes realizar rutas de senderismo que te llevarán por paisajes impresionantes, donde las montañas escarpadas contrastan con los verdes valles. Si prefieres un plan más tranquilo, visita el Monasterio de Santo Toribio de Liébana, uno de los lugares de peregrinación más importantes de España.

Día 3: Santillana del Mar y Comillas

El último día puedes dedicarlo a visitar Santillana del Mar, uno de los pueblos más bonitos de España. Este lugar medieval es conocido por sus calles empedradas y su Colegiata de Santa Juliana. De regreso, haz una parada en Comillas para admirar el Capricho de Gaudí, una de las pocas obras del famoso arquitecto fuera de Cataluña.

Estas tres rutas ofrecen una excelente variedad de paisajes, actividades y experiencias culturales. Desde la naturaleza exuberante de los Picos de Europa y la Selva de Irati, hasta la riqueza histórica de La Rioja, hay opciones para todos los gustos en este Puente de Noviembre para disfrutar con tu coche de alquiler.